Factores externos

La piel seca, o la deshidratación de la piel, es un proceso que se presenta por etapas:

La piel se vuelve seca cuando comienza a perder sus lípidos naturales resultado de la rotura de la barrera natural de lípidos de la piel. La capacidad de retención del agua por parte de la piel está deteriorada.
Esto aumenta la velocidad con la que la piel pierde humedad, provocando la deshidratación de las capas superiores de la piel.
Según la gravedad de la desecación, la piel se vuelve rígida, rugosa y escamosa y es propensa a los picores y el enrojecimiento.

Ilustración de factores hidratantes naturales evaporándose a través de la piel — Una deficiencia en factores naturales de hidratación (NMF) deja las capas superiores de la piel deshidratadas.

Cuidado de la piel

Lavados frecuentes o prolongados, duchas o baños con agua muy caliente, que eliminan los lípidos fundamentales para la función de barrera dérmica.
Un cuidado habitual de la piel inadecuado. Es importante seguir una rutina y utilizar productos que sean adecuados por la piel seca. Es de especial importancia no utilizar jabones fuertes que eliminan los lípidos naturales de la piel.

Medicación
Ciertos medicamentos (como los diuréticos que se prescriben para controlar la tensión sanguínea) y tratamientos médicos (como la radioterapia, la diálisis y la quimioterapia) se sabe que provocan piel seca como efecto secundario. Algunas medicaciones orales para el acné también pueden provocar desecación de la piel.

Hombre lavándose el cuerpo con jabón — Algunos jabones son muy agresivos para la piel y destruyen los lípidos cutáneos naturales.

Mujer tomando la píldora — Algunas medicaciones pueden dar lugar a piel seca. Verifique con su médico si su medicación puede contribuir a este efecto secundario.

Medioambientales

Condiciones climáticas rigurosas: el calor, el frío y el aire seco alteran la función de barrera de la piel.
Cambios estacionales: los síntomas de piel seca a menudo empeoran tanto en invierno como en verano.
La luz ultravioleta (UV) puede desembocar en envejecimiento prematuro de la piel. La piel se vuelve propensa a sufrir deshidratación a medida que envejece.

Las causas de la piel extremadamente seca que incluso se puede agrietar

Las causas de que la piel sea extremadamente seca e incluso con grietas son variadas, desde el mal cuidado de la piel y los factores ambientales a problemas de salud relacionados con la piel como la dermatitis atópica y psoriasis. Estas causas se ven influidas tanto por factores internos como por factores externos.

Deshidratación
La hidratación de la piel depende del equilibrio de agua del cuerpo. Cuando está deshidratado, el cuerpo reduce el suministro de humedad a la piel, que a su vez reduce el flujo natural de agua a través de la piel. Esto puede contribuir a la aparición de piel seca. Las personas ancianas son propensas a sufrir deshidratación y la sensación de sed disminuye con la edad.

Fumar
Los cigarrillos contienen muchas toxinas, entre ellas la nicotina, que provocan una reducción notable del flujo de sangre y pueden ralentizar el metabilismo general de la piel, con la posibilidad de que provoquen deshidratación.

Factores que contribuyen a la piel extremadamente seca, que incluso se puede agrietar

Los factores siguientes afectan al equilibrio de hidratación natural de la piel y pueden provocar que la piel acabe sufriendo rugosidad y grietas:

Cuidado de la piel

Los jabones alcalinos pueden eliminar los lípidos naturales de la piel, con lo cual perderá hidratación.

El buen cuidado diario de la piel juega un papel importante para prevenir y tratar la piel rugosa, seca y agrietada.

Elija un agente hidratante formulado de manera especial para tratar el nivel de deshidratación de su piel y aplíquelo con regularidad en las zonas afectadas. El mejor momento para hidratarse es después del baño o de la ducha cuando la piel está limpia y algo húmeda. Los hidratantes que contienen sustancias que produce la piel normal de manera natural, pero que faltan en la piel seca, son los recomendados para realizar el tratamiento de la piel extremadamente seca y de sus síntomas.

El lavado frecuente también es un factor que contribuye a la aparición de piel rugosa, seca y agrietada. Los baños o duchas muy prolongados, con agua demasiado caliente, dañan el equilibrio de humedad de la piel y reducen su capacidad para conservar la humedad.

Mujer utilizando un limpiador en la cara — Elija agentes limpiadores suaves que protejan los lípidos de la propia piel.

Mujer aplicándose crema en el cuerpo — Los productos formulados especialmente para la piel seca facilitan la restauración del equilibrio de hidratación natural de la piel.

Clima, estaciones del año y exposición al sol
El cambio de estación es una causa común de piel seca rugosa y agrietada. Durante los duros meses de invierno, la piel queda expuesta al tiempo frío en el exterior y luego a la calefacción central de los interiores. Estos cambios provocan la desecación y la piel puede volverse rugosa y presentar grietas. Si se dejan sin tratamiento, estas grietas pueden hacerse más profundas e inflamarse.

La piel también se seca durante los meses cálidos del verano, a menudo como resultado de una exposición excesiva al sol. La piel con quemaduras no es tan efectiva como la piel sana y es más propensa a aumentar su deshidratación. Para prevenir que la piel se vuelva rugosa y agrietada, aplique un protector solar con hidratantes y que esté libre de perfumes y de colorantes irritantes.

Riesgos laborales
Determinadas ocupaciones también pueden aumentar el riesgo de sufrir piel seca. Habitualmente se trata de profesiones donde es necesario trabajar en ambientes muy cálidos o muy fríos (agricultor, pescador), utilización frecuente de frecuencia detergentes (médico, enfermera, peluquera) o con exposición a productos químicos (mecánico, limpiadora).

Mujer protegiéndose la cara del sol — La exposición al sol hace que la piel pierda humedad y que la piel seca lo sea todavía más. Además, los rayos UV pueden causar alteraciones a largo plazo en la piel.

Lavado de manos con jabón — Algunas ocupaciones requieren el lavado frecuente de las manos. Pudiendo empeorar los síntomas de piel seca.

Factores internos

Influencias genéticas
El equilibrio de hidratación de la piel también se ve influido por genética. Podemos heredar de nuestros padres la propensión a presentar piel seca, pero no siempre ocurre así. Problemas de la piel como la dermatitis atópica, la ictiosis, la queratosis pilaris y la psoriasis suelen ser genéticos.

Influencia de las hormonas
Los cambios en el nivel de determinadas hormonas, en particular de estrógeno y de testosterona, pueden influir en la hidratación de la piel y en los niveles de lípidos que presenta. En las mujeres esto es muy visible después de la menopausia o durante el embarazo.
La piel seca también se puede presentar durante el embarazo debido a los cambios hormonales.

Edad
A medida que la piel envejece sus procesos internos se vuelven más lentos y la producción de lípidos se reduce. El contenido en agua de la piel y su capacidad para retener la humedad también se reduce. Estos factores dan lugar a la desecación de la piel lo que a su vez contribuye al envejecimiento de la piel y a la aparición de líneas finas y arrugas. La denominación general de esta situación es deshidratación inducida por la edad.

Dieta
Al igual que cualquier otro órgano, la piel necesita toda una panoplia de nutrientes importantes para funcionar correctamente. Entre estos nutrientes se incluyen los aceites vegetales y las vitaminas, en particular las vitaminas C y E.

Cara femenina con piel oscura" — En la piel más oscura, los signos de envejecimiento parecen menos graves y comienzan en una etapa más tardía.

Mujer embarazada tocándose el vientre — Los cambios de los niveles de hormonas pueden provocar que se deshidrate la piel.

Mujer tocándose la mejilla — Después de los 25 años de edad, la piel se vuelve gradualmente más seca y menos elástica en el trascurso del tiempo.

La piel es el órgano corporal más extenso. Juega un papel vital a la hora de regular la temperatura corporal y actúa como barrera para proteger el cuerpo frente a las infecciones. Su capacidad para actuar como barrera efectiva depende de que se mantenga el nivel de hidratación óptimo. Sin embargo, determinadas partes del cuerpo son propensas a la deshidratación. Cuando la piel está seca, se ve deteriorada su capacidad para retener la humedad y prevenir la pérdida de hidratación, y es menos eficaz a la hora de trabajar como barrera efectiva. La piel seca puede notarse y verse rígida, enrojecida, rugosa, descamada, con picores y, en casos extremos, incluso puede agrietarse. Un buen cuidado rutinario de la piel, usando productos formulados específicamente para la deshidratación grave, ayudará a recuperar la salud de la piel.

Zonas propensas a presentar grietas:

• Manos: lavado frecuente, jabones alcalinos, productos químicos y cambios del tiempo son todos ellos factores que pueden jugar su papel a la hora de deshidratar la piel de nuestras manos. Cuando se producen grietas, normalmente aparecen alrededor de los nudillos ya que la piel está rígida y puede romperse con facilidad cuando se estira.

• Pies: La piel de los pies, y en especial en la zona de los talones, con frecuencia se deseca dando lugar a una piel rugosa y con fisuras. Esto puede ser incómodo y, en casos graves, doloroso e inflamado.

• Labios: los labios secos se agrietan con frecuencia. Los pacientes que sufren acné y toman determinados medicamentos orales pueden sufrir grietas en los labios.

Primer plano de piel seca en las manos — Las manos sufren con frecuencia de piel seca y, en casos graves, la piel que rodea los nudillos se puede romper.

Frente femenina con piel enrojecida y escamosa — La piel facial seca puede volverse áspera e incluso adquirir un aspecto escamoso.

La dermatitis atópica afecta con frecuencia a los niños pequeños, que presentan piel rugosa e irritable en las pantorrillas, la cara interior de los codos y en la zona de las caderas. La piel afectada presenta picores extremos.
La queratosis pilaris está causada por una acumulación excesiva de queratina en los folículos pilosos de la piel. Algunas zonas de la piel afectada se ven cubiertas con un buen número de puntos pequeños, blancos o algo rojos, y la piel se nota rugosa y desigual. Lo más frecuente es que se presente en la cara trasera de los brazos.
La piel afectada de psoriasis a menudo presenta parches de piel extremadamente seca, rugosa y con picor que pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo.
La diabetes, sea de tipo I o de tipo II, también puede provocar que la piel se deseque, se vuelva rugosa, con descamación y picores, en especial en las extremidades del cuerpo como por ejemplo los pies.

Primer plano de una zona cutánea roja y seca — Algunas enfermedades cutáneas vinculadas a la piel seca presentan síntomas como enrojecimiento, descamación y picor.

Las enfermedades y su impacto sobre la piel corporal

La piel seca, o "xerosis"como se conoce en medicina (el término griego "xero" significa "seco" y "osis" significa "enfermedad") es una categoría amplia que incluye a la piel seca de cualquier causa, interna o externa. Otros problemas de la piel que dan lugar a piel seca, rugosa, escamosa, con picores, con desprendimiento de láminas y con grietas pueden ser la dermatitis atópica de la cara o el cuerpo, la ictiosis, la queratosis pilaris y la psoriasis.

La piel seca se presenta de manera gradual y sigue un proceso progresivo:

La piel seca se siente rígida y puede aparecer con una rugosidad de ligera a moderada.
Los primeros signos de la desecación no causan normalmente mucha incomodidad, pero ignorarlos es probable que conlleve a que la deshidratación sea más severa.
La piel muy seca puede estar muy rígida, muy rugosa, escamosa y con picores.
La piel se nota muy rígida y rugosa, y también puede que comience a aparecer con escamas y desprendimiento de láminas.

La piel extremadamente seca tiene un aspecto y unas sensaciones de extrema rugosidad, con escamas y desprendimiento de láminas y también puede picar mucho. En casos extremos la piel también puede presentar grietas.

La deshidratación excesiva puede provocar que la piel se contraiga y se vuelva frágil, lo que puede desembocar finalmente en grietas de la piel. Esto resulta particularmente común en zonas donde se realiza necesariamente una flexión, como las plantas de los pies.

Ilustración de piel seca — Dependiendo de la gravedad de la deshidratación, la piel se vuelve rígida y rugosa, propensa a sufrir picores, descamación y enrojecimiento.

Pie con la planta agrietada — Las plantas de los pies suelen deshidratarse y presentar fisuras.

Síntomas de deshidratación en el cuerpo

La piel seca puede presentarse en cualquier lugar del cuerpo, pero ciertas zonas tienen mayor probabilidad de desecarse mucho e incluso de volverse rugosas y agrietarse.

En este sitio web puede encontrar más información sobre la piel seca y problemas de la piel tales como la dermatitis atópica, psoriasis y xerosis.

Cuidado de la piel extremadamente seca que incluso puede agrietarse.

Evitar otros factores activos

Unos buenos hábitos diarios de cuidado de la piel le ayudarán a cuidar su piel seca, pero también pueden reducir la necesidad de tratamiento aplicando las medidas siguientes:

Evite el aire seco permaneciendo menos tiempo en exteriores cuando la meteorología es de calor o de frio, y usando humidificadores en interiores cuando esté puesta la calefacción.
Reduzca el tiempo bajo el agua caliente optando por las duchas rápidas con agua templada, en lugar de los baños prolongados.
Utilice guantes para lavar los platos, con el fin de evitar el contacto directo con el agua caliente y los detergentes fuertes.
Utilice ropa de fibras naturales como el algodón y la seda, que no irritan la piel. La lana es natural pero puede provocar irritación.
Para lavar la ropa, utilice detergentes libres de colorantes y de perfumes. Estos compuestos pueden permanecer en la ropa después del lavado, y provocar irritación de la piel.
Asegúrese de beber una cantidad adecuada de agua.

Mujer vistiendo ropas de invierno — Los cambios de clima diario también provocan la desecación de la piel, volviéndose rígida y rugosa.

Manos enguantadas lavando platos — Protéjase las manos con guantes cuando estén sometidas a contacto frecuente con agua o con detergentes.

Limpiando la piel corporal áspera y seca

La causa inicial de la deshidratación de la piel y de su rugosidad es la alteración de la barrera superficial de la piel, es importante utilizar agentes de limpieza suaves que no eliminen los lípidos de la propia piel.

Eucerin UreaRepair PLUS Washfluid 5% Urea es un agente muy suave pero efectivo formulado específicamente para la piel corporal seca o muy seca. Limpia sin provocar deshidratación y es adecuado para quienes presentan psoriasis, relacionada con la piel seca.

Mujer dándose toques sobre la piel después de la ducha — Seque la piel aplicándole toques con la toalla, sin frotar.

La piel seca necesita de unos cuidados habituales de la piel que restauren y protejan su barra natural evitando que siga deteriorándose. Reponer los NMF, como la urea, también ayuda a restablecer el equilibrio de humedad de la piel.

Piel muy seca y extremadamente seca, incluida la piel atópica y la piel con diabetes, así como la piel que presenta psoriasis, exige utilizar productos que se han formulado especialmente para tratar el nivel de deshidratación concreto. Al elegir un producto de cuidado de la piel para bebés y para niños, compruebe siempre las recomendaciones para cada edad o bien consulte al farmacéutico o al médico

Hidratando la piel corporal áspera y seca

El primer requisito que deben cumplir los hidratantes de la piel seca es restaurar el equilibrio de humedad de la piel.

La urea, el lactato y otros NMF atraen y retienen la humedad en la capa más externa de la piel. La piel muy seca que se ha vuelto rugosa, rígida, con descamaciones y láminas, con picores e incluso con grietas necesita de una concentración mayor de estos NMF. En general, los productos para el cuidado de la piel seca y extremadamente seca deben contener al menos un 5% y un 10% de urea, respectivamente.

La ceramida ayuda a reparar la barrera lipídica que ralentiza la tasa de evaporación de la piel, regulando la pérdida de humedad.

Mujer tocándose la pierna derecha — La aplicación regular de los productos adecuados para el cuidado de la piel ayuda a mejorar el problema de la piel seca.

Mujer con piel húmeda tocándose el hombro — El mejor momento para la hidratación es después de la ducha o del baño, cuando la piel está limpia y ligeramente húmeda.

Protegiendo la piel corporal seca frente a la exposición al sol

Como la luz UV aumenta la velocidad del envejecimiento, y el envejecimiento de la piel puede aumentar el riesgo de deshidratación, es aconsejable usar una protección solar efectiva:

Reduzca la exposición al sol utilizando ropas protectoras.
Utilice un protector solar con un elevado factor FPS y con ingredientes hidratantes para bloquear los rayos UV y mantener hidratada la piel.
Evite los protectores solares que contengan perfumes y colorantes ya que la piel seca es propensa a la irritación.

Los protectores solares para pieles secas de Eucerin ofrecen una protección solar excelente con filtros de UV efectivos y con el antioxidante licocalcón A para proteger frente a los radicales libres inducidos por los UV, prevenir el envejecimiento prematuro y dar a la piel la hidratación que necesita.